Nuestra Historia

Para que comprendáis queridos Bloggeros  nuestra historia de grupo, primero debéis conocernos a nosotros un poco individualmente y así entenderéis por qué estamos hoy aquí.

Fernando:
Tengo 47 años y mi nombre es Fernando. Llego a la Universidad de una manera poco habitual, mas o menos como ha sido mi vida. Algunas circunstancias me separaron de la escuela a muy temprana edad y anduve por la vida en un ir y venir. Ya de un poco mayor fui encontrando mi sitio, me encontré ayudando al otro y viendo como eso mismo me ayudaba a mi. Se despertaron en mi unas ganas de ser un buen profesional, para poder ayudar dar todo de mi. para ello necesitaba una parte de mi que no tengo, que es la parte que me da la universidad . Cuando llego aquí me encuentro con un grupo de personas y con una facilidad increíble nos vemos haciendo cosas y con un nombre, “Sapere Aude”. Un grupo de gente comprometida y con ganas de aprender, que es justo lo que necesita este mundo en que hay tantas cosas por las que luchar para que no hayan tantas injusticias.

                                                                                Fran:

En el mundo podemos ver, vivir y sentir día a día una infinidad de cosas aunque hay otro tanto que no queremos o no deseamos ver. Vivir la vida mirando hacia otro lado, queriendo ignorar nuestro entorno, haciendo invisibles las cosas que son feas o difíciles de entender. Es tan triste como cierto pues en una sociedad avanzada ,como es la que vivimos, se sigue apartando a los que más ayuda necesitan denigrándolos a un segundo plano para que no interfieran ni desentonen en las placenteras vidas del resto del mundo catalogado como “normal”. Sinceramente me niego en rotundo a vivir de esta manera, ignorando al más necesitado sólo por mi comodidad social. Este reflejo de la sociedad es el que me lanza al mundo de la educación social y el que me da fuerzas para sentir y creer que en nuestra mano queda cambiar lo que tenemos. La observación de la necesidad de un cambio es lo que me motiva día a día y es lo que me obliga a esforzarme y a exigirme lo más que pueda dar para formarme como un profesional competente en este ámbito. El mundo necesita profesionales cualificados que sean el motor que realice este cambio a vistas de mejorar la calidad humana de este mundo en el que quien menos tiene es quien menos vale. Estas motivaciones son compartidas entre muchos de los compañeros de carrera pero el valor para esforzarse y exigirse lo máximo de uno mismo ,que compartimos mis compañeros de grupo y yo, residen en un tanto más escaso. Estos son los motivos que me han lanzado a estar donde estoy, hacer lo que hago y estar con quien estoy.  

                                                                          Mª Rosa:

Mi nombre es Mª Rosa Lucas López tengo 33 años, pertenezco al grupo SAPERE AUDE y la historia que me lleva hasta ellos es la siguiente.

Por motivos personales dejé los estudios demasiado pronto y empecé a trabajar, los trabajos eran en la huerta, almacenes de fruta, camarera y azafata, en fin, que he hecho un poco de todo. En todos esos trabajos he conocido a mucha gente, buena y mala, pero siempre he tratado de quedarme con los actos buenos que la gente ha tenido hacia mí.

Un día decidí hacer los estudios de enseñanza obligatoria para adultos, y fue como si la curiosidad de aprender invadiera mi mente y las ganas de seguir estudiando que me apunte al acceso a la universidad, y aquí estoy, aunque no me lo creo todavía.

El azar hizo que nos unieramos, pero cada día que pasa y estamos juntos siento como si en realidad nos uniera un hilo invisible, es tal la complicidad que tenemos en el grupo, que siento, que esta relación será de esas que te acompañan para toda la vida.

María:
Mi nombre es María y llegué al mundo hace 25 años, durante los cuales he experimentado diferentes vivencias, algunas de más relevancia y otras de menos respecto al momento de formar el grupo Sapere Aude, pero sin duda alguna… todas y cada una de ellas por conjunto son las que me han llevado hasta aquí.
Durante mucho tiempo anduve sin saber exactamente qué estudiar que me llevara a mi verdadera vocación, por lo que con el paso del tiempo aprendí que a mí sería mi vocación lo que me llevaría a estudiar Educación Social.
Como muchos de vosotros, habremos danzado de un lado a otro laboralmente buscando aquello que nos apasione más, y a mí me llegó de casualidad, buscando encontrarme a mí misma decidí hace ya casi 6 años ayudar a aquellos que yo creía que lo necesitaban más, pero mi grata sorpresa fue que yo era quien los necesitaba verdaderamente a ellos.
El hecho de que todas mis aficiones se compenetran tan bien entre sí, con las ganas inmensas de poder aportar mi pequeño granito de arena para construir una sociedad más habitable…. me llevaron aquí, a mi primer año de esta carrera y a formar un grupo de compañeros de clase que bajo el nombre de Sapere Aude, espero que seamos capaces de conseguir grandes cosas y sobre todo aprender los unos de los otros en este viaje de aprendizaje.

Fabiola García:

Mi nombre es Fabiola, soy la más jóven del grupo y vine al mundo una lluviosa tarde hace casi 18 años y desde entonces soy una guerrera. La verdad es que me considero una privilegiada por tener la vida que he tenido, y aunque no todo son momentos buenos, de los malos he sabido sacar lo mejor.
He tenido muchos cambios en mi vida, tanto con consecuencias positivas como negativas, pero de todos ellos he ido aprendiendo y creciendo día a día como persona. Estos cambios desestabilizaban mi vida, y he de decir que yo no iba a estudiar. Por cuestiones ajenas a mí, empecé 1º de Bach. sin querer hacerlo, sin pensamiento de acabarlo y sólo con ganas de salir de allí cuanto antes, pero una profesora a la que desde aquí doy las gracias sacó todo mi pontencial y me hizo descubrir mi amor por la Psicología. Terminé bach. sin pena ni gloria y teniendo claro que si hacía estudios superiores era sólo por hacer Psicología, con la siguiente desilusión de que no me daba la nota. Al principio pensé en dejarlo, pero pronto me descubrieron esta carrera, que seguro que me gustaría, que no me iba a dejar indiferente y que podría sustituir a Psicología, y tan bien me la vendieron que la compré. Y sí, tenían razón. Mi pasión por ayudar a los demás y a la vez aprender de la vida, y sobre todo mi cabeza loca a tan temprana edad me han hecho estar en esta carrera buscando los mismos objetivos que mi grupo, Sapere Aude. Como conclusión puedo decir que este grupo tan singular al que pertenezco es como una gran familia a la que me encanta pertenecer, del que todos sacamos cosas buenas y en el que todos aportamos nuestro pequeño granito para hacer grandes cosas. Así que otro cambio para mi vida, del que puedo asegurar con antelación que me deparará grandes experiencias y la mayoría positivas.

Alicia : 

No sé porqué he elegido Educación Social para cursar, ya que hay muchos otros grados similares con los que poder acceder a los mismos puestos.
Y pienso, que el motivo precisamente clave, es que quiero descubrirlo.
Me percaté de que en mi caso, cumplía requisitos referentes a la profesión, y eso, me llevaba a imaginarme trabajando en un futuro. Empezando por ese momento de descubrimiento, pasé al momento de misterio e incertidumbre, el cual me lleva, a seguir y seguir y seguir descubriendo.

Eva: 

He acabado aquí porque en la vida hay cosas y personas que producen un cambio significativo en ti.

Yo por las circunstancias acabe rodeada de gente que cambiaría el rumbo de mi vida, de una manera de la que no podía ni imaginarme. Siempre he querido cambiar este mundo y gracias a esas personas me di cuenta de que se puede y de que voy a cambiar este mundo.

Y estoy segura de que durante la carrera me encontraré con más personas maravillosas que cambiarán el rumbo de mis pensamientos y mi vida, es más, creo que a alguno ya lo he encontrado.

Todos y cada uno de los miembros de Sapere Aude permitimos que los años construyeran un muro entre las tecnologías y nosotros. En un mundo tan dinámico como este, no podíamos perder el hilo conductor que nos conecta, que nos nutre y que nos permite darnos a conocer. Llegar a formar el grupo que ahora somos no fue por casualidad. Encontrarnos y agruparnos al igual que hace cualquier programa informático, asociar datos en común y reunir, eso es lo que hicieron nuestras mentes en menos de una mañana.

El día que volvimos a coincidir e hicimos nuestra primera práctica, fue como volver a nacer, volver a volver a la red. Digo volver a volver porque aparentemente siempre habíamos estado navegando por ahí, pero desde luego que la vista ahora es muy diferente, se divisa un distinto horizonte, sin fronteras y con el que poder expandirse.

Si Internet nos acerca al mundo, no dejemos que nos aleje de la vida y pongamos vida a este mundo electrónico a la vez que inerte.

Los cachos de partes que expongamos serán parte de nuestras vivencias y precisamente sacar lo mejor de cada uno, es el propósito del grupo,

donde las barreras las pones TÚ…

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